
Antidio Viguria
Director de Aviónica y Sistemas de CATEC
Las últimas noticias sobre la declaración en quiebra de Lilium y Volocopter y la decisión de Airbus de no continuar con su programa CityAirbus NextGen, nos puede hacer preguntarnos si realmente el sueño de la movilidad aérea innovadora es realista.
Aunque es verdad que el nivel de inversión necesario para poder diseñar y certificar los llamados “taxis aéreos” es tremendamente alto (solo Joby ha conseguido atraer 2.500M$ y Lilium se gastó 1.400M€ antes de declararse en quiebra), también es cierto que la movilidad aérea innovadora no se ciñe únicamente a “taxis aéreos” o transporte de personas mediante nuevas configuraciones de aeronaves eVTOL (electrical Vertical Taking-Off and Landing). El transporte de mercancías y la movilidad en zonas rurales presentan multitud de oportunidades que además tienen unas barreras de entrada menores, al ser operaciones con menor riesgo operacional, y por lo tanto requieren un menor nivel de inversión.
En un país como España, en el que el 79% de los municipios concentran alrededor del 10% de la población, existe una gran necesidad de desarrollar soluciones que permitan mejorar los servicios disponibles para la población que habita en estas zonas. Los UAS, o comúnmente llamados drones, tienen como ventaja que permiten conectar zonas alejadas con una muy baja inversión en infraestructuras, de forma rápida y segura. Este aspecto es fundamental a la hora de ofrecer servicios que hagan uso de UAS relacionados con emergencias y transporte de mercancías.
Además, no solo pensemos en pequeños drones, están apareciendo UAS en el mercado con una gran capacidad de carga, como el NUUVA 300 de Pipistrel que pueden cargar 300Kg a 300Km de distancia. Este tipo de aeronaves serían de gran ayuda para mejorar la conectividad de la llamada España vaciada de una manera flexible, adaptándose fácilmente a la demanda en cada momento, y con una mínima inversión en infraestructura.
“Los UAS permiten conectar zonas alejadas con una muy baja inversión en infraestructuras, de forma rápida y segura. Este aspecto es fundamental a la hora de ofrecer servicios que hagan uso de UAS relacionados con emergencias y transporte de mercancías”.
Esta mínima infraestructura necesaria se debe centrar en dos aspectos claves: vertipuertos y sistemas CNS. Los vertipuertos son zonas de aterrizaje y despegue especialmente diseñados para este nuevo tipo de aeronaves VTOL. De hecho, recientemente en España se ha publicado el Libro Blanco de los Vertipuertos desarrollado por el clúster SIAM (al que pertenece CATEC) donde se establecen las bases para el desarrollo de estas infraestructuras esenciales para la movilidad aérea innovadora.
Por otra parte, en relación a los sistemas CNS, es necesario proveer de servicios de navegación, comunicaciones y vigilancia a este nuevo tipo de operaciones cuyo objetivo es que estén altamente automatizadas. La aplicación de tecnologías y sistemas existentes será clave para reducir los costes de inversión y hacer más viable el desarrollo de nuevos servicios de movilidad aérea innovadora en la España vaciada. Por ejemplo, el uso de los nuevos servicios de Galileo o de comunicaciones por satélite son tecnologías habilitadoras fundamentales para este nuevo tipo de operaciones.
Retomando la pregunta inicial, ¿sigue siendo viable la movilidad aérea innovadora?, la respuesta es que SÍ, aunque tanto en el sector de la movilidad aérea como en el de los UAS es importante ir paso a paso, y aunque la regulación europea es de las más avanzadas del mundo y cubre operaciones de elevado riesgo, la realidad es que aún queda mucho trabajo por hacer para que sean servicios escalables.
Por lo que, por qué no empezar por entornos de menor riesgo que nos permita rápidamente desplegar soluciones, ganar experiencia y posicionar a España como un país puntero en el desarrollo de tecnologías UAS aplicada a servicios reales.